Huatusco, Ver.- Agobiados
por la crisis que se vive en el campo de la región y del país, feligreses de la
localidad Tlavictepan, quienes veneran en su capilla a San Isidro Labrador,
caminaron por calles de Huatusco en una peregrinación sacando a pasear su santo
patrono llevando una yunta de bueyes utilizados para el trabajo diario de
labranza en los campos del municipio de Zentla.
Uncidos y jalando el arado
los dos enormes rumiantes caminaron encabezando el peregrinar de los campesinos
para pedir al patrono de la capilla de la comunidad bendiga sus cosechas, pero
sobre todo que estas sean abundantes en los meses venideros.
Dedicados al cultivo del
café, los feligreses anduvieron calles y avenidas cantando alabanzas, llevando
al patrono de los religiosos a bordo de una camioneta, con la música de viento
al frente de la marcha.
Los bovinos arrastraban el
arado colocado sobre dos ruedas, el párroco Luís Enrique Hernández Rosas,
caminó con sus feligreses en la primera peregrinación que llevaba una verdadera
yunta utilizada para el trabajo diario de las parcelas de Marcos Colorado en la
localidad el Huaje.
Costó trabajo a los
organizadores de esta peregrinación tan simbólica que, se espera, el próximo año
tenga más apoyo de los huatusqueños, y con el paso del tiempo busque dar mayor
trascendencia a la región, indicaron los vecinos de Tlavictepan.
El primer recorrido fue
por las calles del centro de la ciudad, más tarde los dos animales fueron
llevados a la entrada a la comunidad de donde realizaron otra peregrinación que
concluyó en la capilla con una celebración eucarística.
Curiosos comentaban el
simbolismo de la yunta y de San Isidro que cada año los campesinos le piden
abundancia en sus cosechas.
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